Un nuevo poeta
Estoy lejos de ser especialista en la materia, y si he decidido hablar de este gran poema, no es como lector o crítico profesional, sino como habitante de la misma región epiritual; como testigo, igualmente, de las mismas fuentes de donde brota esta poesía, uno de los iniciados, de los confidentes, que ha visto con sus propios ojos el lugar al que se une, y el lugar donde también se separa de la vida, del paisaje, para emprender el vuelo en su propia esfera. Lo que me une a este poeta no es sólo el mismo país natal, la misma región terrestre. Si existe una geografía espiritual, si en el mundo interior ocupamos ese círculo, esa esfera, nuestros confines son próximos, nuestros universos están sumidos en el mismo clima, el aura de las mismas regiones nos rodea con el mismo soplo. Es esta proximidad la que me concede el derecho a tomar la palabra al respecto: con el deber de testimoniar y decir por qué esta poesía me seduce y subyuga. |